día y hora

viernes, 6 de abril de 2012

DEPREDADORES DE PERIÓDICOS- Artículo periodístico-Publicado en Faro de Vigo, 10-04-2012-


Algunos cuando vamos a una cafetería acostumbramos a tomar nuestra consumición, ya sea un café o una caña de cerveza, en la compañía de un periódico…., si lo encuentras disponible, claro. Nos da igual muchas veces tener al lado de nuestra taza de café cualquier periódico o revista de tirada nacional, local, deportivo, un suplemento atrasado desmembrado de su original, o lo que sea. Pero uno necesita tener en su compañía alguna publicación amiga o enemiga en última instancia, porque, de lo contrario el café se puede convertir en úlcera gástrica y la caña en un dolor de cabeza espantoso.
            Por eso cuando entras y hurgas en el lugar donde debería haber un periódico y no lo encuentras, sientes una pena y desazón que te turba el espíritu. A veces, cuando hay confianza, antes de pedir tu consumición, preguntas afirmando: ¡Si no hay periódico disponible no me pongas nada! Si la respuesta es:” En estos momentos están todos ocupados”, la decisión esta ya tomada.  Te vas resignado en busca de mejor fortuna. Pero a veces tentamos al diablo y aguardamos sigilosamente, agazapados en la barra, atenta la mirada y agudizado el oído, en busca de la presa más codiciada. Lo más dramático es cuando observas a tu alrededor y ves que todos los periódicos están en manos de verdaderos depredadores. Basta una atenta mirada y un repaso a estas almas solitarias que pueblan nuestros bares y cafeterías para darte cuenta enseguida que no será fácil que se desprendan de su presa tan fácilmente. Clavas tu mirada, los observas y compruebas como se regodean regostándose en sus contenidos; como pasan y manosean sus páginas lentamente, a veces con intercambios de fluidos en las yemas de sus dedos. Leen hasta las noticias más irrelevantes; las esquelas es una de sus secciones preferidas , observando con atención a aquellos que un día fueron cuerpos y ahora almas, dejando el espacio libre para que ellos-los depredadores- puedan saborear aún más si cabe su preciada caza.
            Cuando crees al fin que van a soltarla, ya saciado su instinto y apetito, vuelven de nuevo a la portada y comienza así una espiral de lectura, rebuscando entre las noticias y anuncios por palabras algún resto de carne que llevarse a la boca.
            Pero lo que te sacará de quicio definitivamente es cuando observas perplejo como sacan del bolsillo de su chaqueta una pluma o estilográfica y se disponen a chafarrinar, dejando su huella indeleble en el crucigrama y/o sudoku. Aquí es donde los depredadores marcan definitivamente su territorio y hacen suya la presa. En este momento te das cuenta que has perdido la batalla, que tienes que pensar en una retirada honrosa y buscar otros territorios inmaculados en busca de tu espacio y de tu tiempo, lejos de esa jauría de depredadores de periódicos.

jueves, 5 de abril de 2012

EL PRIMER AMOR


EL PRIMER  AMOR

Uno lo recuerda como lo que fue,  sencillamente hermoso e irrepetible. Casi recién salido de la niñez, en la incipiente juventud, surge un buen día entre un mar de dudas concupiscentes. Es lo que más te importa en la vida. No puedes pensar en otra cosa, noche y día. Las ilusiones y los proyectos efímeros se mezclan en tu mente y tus hormonas inician un camino desenfrenado buscando preguntas, dudas existenciales y también terrenales.
          Es una etapa que la recordarás toda tu vida; a veces entremezclada oníricamente en tus sueños y en tus deseos. Es un refugio al que siempre deseas volver cuando la vida te cubre de nubarrones y tormentas.
         Un buen día, sin saber el motivo, desaparece como la niebla en el verano, y sientes un vacío que te durará algún tiempo, pero que a ti te parecerá siglos de travesía en el desierto.
          Vendrán otros……, pero no será el-lo-mismo. Guardarás en tu corazón y en tus pensamientos la fruta dulce y amarga, al mismo tiempo, y la candidez que para uno representó en su vida su primer amor.






martes, 3 de abril de 2012

CARTAS SIN RESPUESTA-Publicado en Diario La Opinión de A Coruña, 12-04-2012-


No hace mucho un amigo mío, en una situación personal y profesional muy complicada, envió no una, sino dos cartas-certificadas con acuse de recibo- a su jefe. No obtuvo respuesta a ninguna de ellas. Después me enteré por la prensa que éste andaba más preocupado en cubrirse las espaldas tratando de marchar en las mejores condiciones posibles después de haberse blindando su contrato y asegurarse su sustancioso plan de pensiones  e indemnización millonaria, que en ayudar a sus propios empleados. A este jefe le sucedieron otros, tratando de llevar su “recompensa” por los servicios prestados hasta límites injustificables y socialmente reprobables,  ante la mirada cómplice de unos  y el cabreo de muchos.
            Atrás quedaron las alegrías y los despropósitos, las arengas patrióticas en las asambleas generales y los auto convencimientos espurios; las órdenes más inasumibles. Luego llegaron las consecuencias más dramáticas a sus decisiones. Todo era válido. No importaba los medios ni la forma, sino “preferentemente” el fin. Con sus decisiones llevaron a muchos a seguirles y compartir un frenesí de locura por conseguir unos objetivos cada vez más difíciles de alcanzar. Ensimismados en sus torres y palacios contemplaban la  contienda,  conocedores  de que un día, cuando las cosas viniesen mal dadas, ellos marcharían “de rositas” habiendo obtenido su bien atada y codiciada recompensa. Son depredadores natos y siempre juegan con las cartas marcadas, indolentes ante el sufrimiento ajeno. Para esta casta de caza recompensas, el no contestar a dos, diez o cien cartas, dejando en la cuneta y sin respuesta a muchas personas, sencillamente les importa un bledo.

lunes, 2 de abril de 2012

O FILLO DA VIÚVA


Aconteceu hai algún tempo no meu pobo, en Bueu; e mesmo saíu no Faro como noticia de sucesos.
 Certo día, coma de costume, despois de almorzar saquei o meu coche do garaxe e púxeno enriba da beirarrúa, mentras a miña dona pechaba a porta da nosa casa. Sentouse ao meu carón, no asento dianteiro e de súpeto, mirando de esguello aos asentos traseiros do coche para deixa-lo  seu  bulso de man , atopouse coa faciana e tamén co corpo dun home que dende a oscuridade-era moi cedo, case de noite-, díxolle: Moi amable señora, pero eu xa levo a miña carteira.
            Como vos podedes supoñer, botou pola súa boca un berro de terror, case un alarido alporizado que mesmo chegou ata o recuncho máis afastado da vila.
            ¡Eu lle dixen:¡Acouga, muller!, non teñas medo,  é o meu amigo de toda a vida, o fillo da viúva.
            Dende aquela, pasaron moitos días, semanas, sen dirixirme a palabra.
            ¡Pero, cómo me fas isto, meu home!; case dame un esvaecemento; seica queres matarme a  desgustos, ou!
            Non pretendo tal cousa, miña rula. Tiven que explicarlle quen era o meu amigo.
            Foi, e segue sendo o meu amigo da nenez e adolescencia; de batallas con pistolas de estralos; das nosas liortas na requisa e nos penedos; e tamén nos reinos de area na rompente das ondas na beira do mar.
            Fumos xuntos  á escola, na Capilla Vella e máis coa señorita Gelines e Manoel Aboi, mestres daquela na nosa Vila.
            Á tardiña, compartiamos os nosos bocadillos de nocilla, mentres xogabamos, según a estación do tempo, ás buxainas,  ás bólas, ao fútbol nas dunas na Praia de Agrelo, ou mesmo facendo xirar o aro polas nosas rúas e camiños.
            Foi o meu amigo máis prezado. Eramos coma unlla e carne.
            Despois, co paso do tempo, puxemos distancia por medio; eu nos  Paúles i él traballando, primeiro co seu pai-a súa nai morrera cando aínda era un neno-, e despois fíxose mariñeiro, e mesmo percorreu o mundo enteiro.
            Non nos víramos dende había perto de trinta anos; e un día, mentres estaba eu mercando o meu periódico habitual na banda do río, alguén púxome unha man no meu ombreiro:¡Milucho!, díxome; i eu, virando a faciana e con esa ledicia da amizade recuperada chameino polo seu nome . Demos unha aperta inacabable, e ficamos falando largo tempo.
            Dende aquela, voltamos a ser novamente inseparables, e de cando en vez, quedamos para tomar uns carolinos de tintofemia, e falar das nosas cousas; recobrando a amizade de toda a vida. O meu amigo, o fillo da viúva.

LA DECISIÓN MÁS ARRIESGADA


LA DECISIÓN MÁS ARRIESGADA 

Apenas tuvo tiempo de completar su juventud adoptó la decisión de emprender una nueva vida  lejos y al margen, en muchas ocasiones, de su propia familia.
            Se encerró en una urna de cristal e incomprensión, sin saberlo. Consiguió poder y no pocas ambiciones. Le sonrió la fortuna y obtuvo algunas alegrías. Saboreó las mieles del triunfo. Lo tenía todo al alcance de sus manos, y toda la vida por delante.
            El tiempo y el contacto con otras formas de entender y vivir el presente le llevó a una encrucijada.
            Un día, siendo todavía muy joven, tomó la decisión más arriesgada. Cayó la noche en pleno día; y el firmamento descendió al ponto más profundo. El tiempo se detuvo, y se hizo el silencio de repente.

            Ahora descansa en paz, en medio del bosque, entre fragancias de eucalipto y jazmín; y también en la arena del mar, formando parte del lecho marino, guardando sus recuerdos para siempre.

domingo, 1 de abril de 2012

FEÍSMO


FEÍSMO
Conforman nuestro paisaje y paisanaje desde hace décadas; y  son muestra evidente de las vergüenzas en nuestras playas, montes y fincas.
            Adoptan las más variopintas  formas : Somieres metálicos que otrora sirvieron para el descanso y placer horizontal, ahora se han convertido en cierres a modo de cancelas en muchas de nuestras fincas; caravanas oxidadas cubiertas de hiedra y musgo o camufladas entre vegetaciones silvestres; galpones en forma de bloques asoman entre cimientos de grava y cemento; y algunas, con el tiempo, han alcanzado asombrosamente la categoría de pequeños chalets de postín, desafiando las alturas, la aerodinámica y la arquitectura teórica y práctica.
            A pesar de las  advertencias, sanciones urbanísticas, intentos de demolición, que en algún caso aislado llega a materializarse, sobreviven en el tiempo ante la pasividad de ayuntamientos y demás Entes Públicos con competencias en la materia, enfrentándose con indolencia a las leyes y al buen gusto.
            Falsos leones o águilas que más bien parecen pichones, y demás fauna indescriptible, pueblan las ostentosas columnas de las entradas de sus palacios.
            Carteles intimidatorios en sus posesiones: ¡Propiedad Privada, No aparcar!, advierten al paseante de un lugar dañino y  prohibido…. para la vista.
            En sus dominios hacen ostentación de un gusto chabacano, con desproporción evidente entre las formas y el terreno circundante. Dentro, tiras de hormigón y baldosa barata; falsos jardines y grama conviven con desproporcionadas “mesas de los doce apóstoles”; cobertizos imitando a falsos porches copiados de las mejores películas americanas;  especies invasoras vegetales y arbóreas, antinaturales con el entorno paisajístico.
            Mientras dentro, un coro de canes solitarios y aburridos, y el ruido extemporáneo y dominguero del bricolaje más agresivo, rompen la tranquilidad y truncan el sosiego necesario que debe presidir la naturaleza en todo momento.
            En definitiva, son la antítesis y el estereotipo  más rancio del  buen gusto paisajístico.