EL ÚLTIMO QUE CIERRE LA
PUERTA
El Sr.MAFO, acrónimo del Gobernador del Banco de España lleva
en el cargo cerca de seis años cuando en julio de 2006, previo paso por la
secretaría de Estado del ministerio de Hacienda, sustituyó en el cargo a Jaime
Caruana. Durante todo este tiempo vio cómo florecía nuestra armada invencible
financiera, “supervisando sui géneris” los
balances muchas veces maquillados de bancos y cajas de ahorros, amén de otros
chiringuitos financieros innominables y que ha dado más de un susto a los
sufridos ciudadanos.
Aplaudido
por unos(los suyos) y denostado por
otros(los que más) se aferró al cargo
debido en buena parte a los vientos favorables que soplaba en nuestra economía,
principalmente cuando la bonanza económica del
boom del sector del ladrillo.
Ahora que el
interbancario echó el cierre sine die, con
una tasa de paro del 24%, la desconfianza de los mercados en nuestro sistema financiero, la salida de capitales de
nuestro país que solamente en los tres
primeros meses alcanzó la cifra récord de 97 mil millones de euros, la escalada
de nuestra prima de riesgo que superó el listón de los 500 puntos básicos
varias veces, con el fantasma del rescate dicho en “petit comité” en las
reuniones de alta alcurnia en Bruselas, y sobre todo por las disputas
partidistas de nuestros políticos más ilustres, encendiendo y avivando la llama
de la sospecha sobre nuestras cuentas públicas, el Sr. MAFO ha decidido antes
de la fecha oficial tirar la toalla, invitado, como no, por nuestro Gobierno y
dejándolo a aquél con un palmo de narices. Se va dejando la llave de su
despacho a su secretaria y diciéndole “el
último que cierre la puerta”. Quién sabe si el próximo Gobernador del Banco
de España encontrará algún día hurgando en los cajones de su despacho algún
informe oculto y manuscrito del Sr. MAFO digno del mejor género de novela de
intriga.
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