PERDÓN, ANTES DE NADA
Perdón, Sres. Presidente y Consejero delegado de NGB, antes de nada por atreverme a
contestar a sus declaraciones, acto de contrición, manifiesto de culpabilidad y
buenos deseos que han efectuado en esa comparecencia pública del pasado día 12
de julio, apareciendo a la limón a toda página en todos los medios de
comunicación del país (perdón, excepto en
alguno de la ciudad de Vigo donde el consejo de NGB tiene su sede social).
Al mismo tiempo hoy nos hemos despertado con otra campaña informativa y en los
mismos medios en la que aparece una empleada de la entidad manifestando, entre
otras cosas, ser “confesa” de haber mal vendido en su día productos financieros
complejos hasta en su propia familia. No sabemos si esta campaña publicitaria, verticalmente
descendente en el organigrama de la empresa, continuará en los próximos días.
Desconocemos
también cuánto dinero se ha gastado NGB en esta campaña, que sumado a la de
EVO, marca ad hoc y unidad de negocio con un concepto de banca inteligente al estilo de “fresh-banking” creada por la primera y que opera en toda
España excepto en Galicia, Asturias y León y con condiciones diferentes en
algunos de sus productos financieros, nos sorprendió a más de uno cuando nos
disponíamos a ver por televisión algunos partidos del último campeonato europeo
de fútbol. A buen seguro que a más de un cliente que tiene atrapado su dinero en estos momentos en preferentes o subordinadas,
por ejemplo, le gustaría saber que su situación actual de penuria económica bien
podía ser aliviada en parte por estas campañas publicitarias que, dicho sea de
paso, también están sufragadas por el Estado que tiene en estos momentos el
control del 93% del capital de NGB. Si no es verdad lo anterior, pido perdón.
Perdón,
antes de nada, por no decirnos abiertamente, como lo contempla el “memorando de entendimiento” acordado por
el Eurogrupo para la banca española
recientemente, cuál va a ser finalmente la estimación de merma del capital
invertido en productos como las preferentes, salvo que la Justicia resuelva en
algunos casos lo contrario, claro.
Perdón,
antes de nada, por manifestarles que echarle la culpa a equipos directivos
anteriores es una táctica de escaso recorrido; si no que se lo digan al PSOE
yal PP que se echan la culpa mutuamente de la herencia política y económica
recibida, diluyéndose siempre esta culpabilidad en el mar tormentoso de los
mercados, cargando con el muerto los de siempre.
También debo
pedir perdón, antes de nada, por decirles que su deseo tan loable de conseguir
un banco “independente galego e para os
galegos” bien saben ustedes que es una entelequia, puesto que los capitales
son caprichosos, y lo mismo puede haber accionistas sensatos como especuladores
despiadados, ya sean estos de origen gallego, español, americano o chino.
Finalmente,
pido perdón por pedir perdón ustedes en esa rueda de prensa estudiada hasta el
más mínimo detalle en la que han garantizado que en el futuro no van a percibir
los directivos indemnizaciones abusivas, pero como reza la letra pequeña de
algunos contratos de productos de inversión:”tropelías
pasadas no garantizan desmanes futuros”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario